viernes, 24 de marzo de 2023

¿Qué es la telemedicina?

¿Qué es la telemedicina y cómo puede ayudar a mejorar la salud global? En este artículo se realiza una aproximación a la definición de la Organización Mundial de la Salud sobre la telemedicina y se exploran sus posibilidades para proporcionar asistencia médica eficiente y de buena calidad en todo el mundo.

El fin de este artículo es realizar una aproximación a lo que se conoce como telemedicina, a partir de la definición dada por la Organización Mundial de la Salud desde el año 1988, como la distribución de servicios de salud en la que la distancia es un factor crítico, donde los profesionales de la salud usan información y tecnología de comunicaciones para el intercambio de información válida para el diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades o daños, investigación y evaluación, y para la educación continuada de los proveedores de salud pública, todo ello en interés del desarrollo de la salud del individuo y su comunidad.

Se emplea el término telemedicina, y no otros adoptados, y toda la información contenida se centra en los pacientes. En el año 1999, el Consejo de Evaluación de Tecnologías de la Salud de Québec, Canadá (CETS), concluyó que una de las principales causas de fracaso de numerosos proyectos de telemedicina se atribuye a que su desarrollo se centró más en la propia tecnología que en las necesidades concretas del personal de salud o de la población beneficiaria.


¿Qué es telemedicina?

Es cualquier acto médico realizado sin contacto físico directo entre el profesional y el paciente, o entre profesionales entre sí, por medio de algún sistema telemático.

En otras palabras, la telemedicina utiliza las tecnologías de la información y las telecomunicaciones (por medio de los sistemas telemáticos) para proporcionar o soportar la asistencia médica, independientemente de la distancia que separa a los que ofrecen el servicio.

Aunque los gobiernos promulgan a diario políticas para mejorar la cobertura en salud y la calidad de la asistencia médica, factores como la alta dispersión poblacional, las distancias y la escasez de especialistas en todas las áreas de la medicina se contraponen a estas voluntades políticas.

A medida que crecen los problemas de salud, los gobiernos canalizan los recursos económicos y dictan leyes que pretenden paliar a corto y mediano plazo las dificultades del sector en lo que concierne a cobertura, y dejan a un lado la asistencia médica eficiente y de buena calidad a la que tienen derecho todos los seres humanos, sin importar su estrato económico y su ubicación geográfica.

Como lo demuestran estudios realizados por la Organización Mundial de la Salud, la buena formación intelectual de las comunidades está ligada, en forma directa e indefectible, a una buena salud y nutrición. Si la población laboralmente activa no tiene buena salud, jamás tendrá un progreso sostenible y creciente en el tiempo.

La mala salud se refiere, de manera integral, a una nutrición deficiente y al padecimiento de enfermedades incapacitantes, tratables y prevenibles, en adultos y en la población infantil.

Por ello, la telemedicina hoy entra a desempeñar un papel fundamental en lo que concierne a la mejora sostenible de la salud de las comunidades, a nivel global. Es una herramienta más para el buen desempeño científico del personal de la salud, que no solucionará todos los problemas existentes en el sector sanitario, pero que con los avances generados durante los últimos quince años de las telecomunicaciones alámbricas e inalámbricas, entrará a desempeñar un rol de marcada importancia en todos los países del mundo.


Cómo está el mundo en telemedicina

A grandes rasgos, se puede decir que desde 1950, en la Universidad de Nebraska, en Estados Unidos, se incursionó en telemedicina, cuando se diseñaron aplicativos experimentales para la transmisión de signos vitales, lo cual fue acogido en 1960 por la NASA para el monitoreo de los astronautas en tiempo real.

A través del tiempo, países desarrollados, como Canadá, India, Reino Unido, Australia, España y Estados Unidos, han implementado sistemas de telemedicina para la atención de sus comunidades, basados siempre en los problemas topográficos y de distancia existentes, y han roto de esta manera las barreras espacio-temporales para la atención de pacientes.

Latinoamérica se encuentra realmente huérfana en lo que respecta a soluciones de telemedicina. En algunos países se realizan “pilotos” o “demos”, y a la fecha no es entendible que sistemas de telemedicina desarrollados y puestos en funcionamiento en otros lugares del planeta no se estén implementando en la región.

Hoy se cuenta con un sistema de telemedicina integral, con nueve servicios en todos sus 29 municipios, y en funcionamiento, diseñado, integrado e instalado por quien escribe estas líneas, en el departamento del Meta en Colombia, lo que demuestra que cuando existe la voluntad política, este tipo de implementaciones se pueden llevar a cabo.

En el año 2010, esta región presentó ahorros cercanos a los 600-800 mil dólares a su sistema general de salud, sin contar con una serie de intangibles difíciles de valorar, como la calidad e inmediatez de la atención por parte de los diferentes especialistas y el bienestar en salud proyectado a las comunidades de la región.


La ética en telemedicina

Este ha sido uno de los factores más polémicos. La responsabilidad del paciente es de quien está presente en el mismo lugar con él, prestándole atención asistencial. Distinto es que quien se encuentre físicamente con el paciente, utilice como herramienta la telemedicina para obtener un concepto especializado, a fin de resolver una patología que tenga entre manos. La opinión especializada es muy valiosa donde hay limitaciones científicas.

En resumen, con un sistema de telemedicina adecuado e idóneo, un médico de atención primaria y/o general, en un hospital de primero o segundo nivel, tiene en su mano el “staff” de especialistas de una institución de mayor nivel de complejidad, para apoyarse en las conductas médicas a que haya lugar y resolver problemas patológicos críticos que se presenten.


La confidencialidad de la información

Cualquier sistema de telemedicina, sin importar el número de servicios donde se implemente, debe operar sobre intranet y no sobre internet. Como rezan las diferentes leyes y la jurisprudencia a nivel mundial, la información médica de los pacientes pertenece a ellos y no a los gobiernos, las instituciones de salud o el médico, y es totalmente confidencial.

Como hoy no existe un sistema de internet que no sea vulnerable, surge la pregunta: ¿qué institución de salud se puede dar el lujo de tener una penetración espuria en los servidores donde tenga almacenada la información médica confidencial relacionada con historias clínicas, exámenes, interconsultas, imágenes diagnósticas, etc.?

Por lo anterior, se recomienda a aquellos que realizan procedimientos de telemedicina bajo la modalidad de internet, que migren su conectividad a intranet.


¿Cómo implementar la telemedicina?

Aquí le presentamos algunos pasos que se deben cumplir con exactitud para no cometer errores que lleven al fracaso.

Antes de implementar algún sistema con cualquier número de servicios, se debe:

  • Determinar primero los factores demográficos y epidemiológicos de morbi-mortalidad que aquejen a la población del sector que se va a cubrir, seguidos por la capacidad económica de la región objeto de la implementación.
  • Visitar y elaborar un cuestionario detallado de todos los hospitales objeto de la implementación, y establecer los servicios que poseen.
  • Determinar técnicamente el tipo y facilidades en comunicaciones existentes, conectividad, vías, aeródromos, etc.
  • Trazar, en conjunto con las autoridades de salud, una logística cronológica de implementación, una vez que se establezca que se implementará el sistema.
  • Capacitar a todo el personal de la salud que operará el sistema.


¿Cómo deben ser los sistemas de telemedicina?

Los hospitales donde se instala este tipo de sistemas crecen y se modernizan, algunos de forma más rápida que otros. Por ello, en su diseño los sistemas de telemedicina deben ser modulares, lo cual permite que de manera escalonada se puedan instalar servicios a través del tiempo, y evitar así la obsolescencia, factor común en cuanto a informática se refiere.


Justificaciones sociales y económicas para la implementación de la telemedicina

La telemedicina ha adquirido un papel importante en la prestación de servicios en salud, por múltiples razones. Entre ellos está el número de personas que carecen de atención especializada, la distancia en lo que corresponde a ubicación de los habitantes en un territorio específico y la topografía del mismo.

En la actualidad, la asistencia médica que se presta a los habitantes en Latinoamérica es personalizada, físicamente en dependencias hospitalarias. Establecer sistemas de telemedicina tiene ventajas sociales preponderantes, como las siguientes:

  • Accesibilidada la atención especializada, con médicos pertenecientes a los hospitales de mayor complejidad, de forma inmediata por parte de la población, sin importar dónde se encuentre ubicada, gracias a que este tipo de tecnología permite conectividad permanente con los hospitales de atención primaria, como se dijo antes.
  • Mejor calidad en la atención médica a la población, puesto que los médicos de asistencia primaria pueden tener comunicación efectiva y rápida con los especialistas ubicados en los hospitales de mayor complejidad.
  • Ahorro sustancial en medios diagnósticos, ya que se evitaría, en las instituciones de salud, privadas y públicas, la duplicidad de exámenes cuando los pacientes son remitidos a una entidad hospitalaria de mediana y alta complejidad.
  • Mayor efectividad y disminución de costos al momento de remitir pacientes, desde establecimientos primarios de atención (hospitales de primero o segundo nivel, centros o puestos de salud), a hospitales de mediana y alta complejidad, para manejo de patologías críticas. Se puede tomar, en conjunto con los especialistas ubicados en el hospital de mayor complejidad, la decisión de remitir un paciente, previa estabilización correcta del mismo gracias a los sistemas de telemedicina, y disminuir ostensiblemente las complicaciones y la mortalidad. Así mismo, al momento de remitir al paciente al hospital de mayor complejidad, los especialistas saben de antemano a qué patología se van a enfrentar cuando lo reciban.
  • Disminución de costos económicos y sociales en cuanto al traslado de pacientes, puesto que se evita la remisión innecesaria de enfermos con diferentes patologías a instituciones de mediana y alta complejidad, las cuales, con una buena orientación por parte de los especialistas, a través del sistema de telemedicina, científica y tecnológicamente bien estructurado, se pueden tratar en el sitio primario de atención. El traslado de pacientes entre diferentes puntos es usual cuando las enfermedades que se presentan no permiten realizar atención especializada, de acuerdo con la capacidad instalada en los centros, puestos de salud y hospitales de atención primaria. Esto eleva los costos, puesto que el traslado de los pacientes críticos pocas veces se hace por vía aérea y requiere, mínimo, la compañía de un médico y/o enfermera y un acompañante.
  • Reducción en tiempo para la toma de decisiones terapéuticas de ciertos pacientes, que en un momento determinado se pueden atender en una institución primaria de salud.
  • Disminución ostensible de errores diagnósticos y terapéuticos en los centros de atención primaria, al tener el médico de atención primaria, con un sistema de telemedicina, como ya se dijo, el staff de especialistas en su mano, lo que además se traduce en un ahorro significativo en costos para las diferentes instituciones de salud.
  • Mayor universo de cobertura, puesto que con un sistema de telemedicina bien instalado se benefician de una buena atención en salud adultos, niños y niñas de todos los estratos socioeconómicos.


Algunos objetivos específicos que debe cubrir un sistema de telemedicina

  • Prestar servicios interactivos de diagnóstico y videoconferencia.
  • Recepcionar y enviar imágenes diagnósticas en tiempo récord.
  • Agilizar el diagnóstico por parte de los especialistas.
  • Impactar con una alta calidad médica la precisión diagnóstica.
  • Impactar con una alta calidad médica la decisión terapéutica.
  • Segunda opinión en diagnóstico y tratamiento.
  • Aumentar la eficiencia de los centros de autorización para remisión.


Fuente: elhospital.com

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Los comentarios con contenido inapropiado no serán publicados. Si lo que Usted quiere es realizar una consulta, le pedimos por favor lo haga a través del link de Contacto que aparece en este blog. Muchas gracias