Inteligencia Artificial y Salud: aspectos legales de una relación compleja

A partir de la pandemia por Covid-19 y la necesidad de acortar tiempos y distancia, la Inteligencia Artificial (IA) ganó terreno en todos los aspectos de la vida, posicionándose como una herramienta transformadora. Sin embargo, su implementación en campos sensibles como el de la salud, requieren de una regulación que plantee los límites de su aplicación con el objetivo de brindar respuestas correctas a los pacientes y una necesaria distinción de si el algoritmo está basado en datos o conocimiento.

Para entender el contexto actual y cómo se complementa la IA con la labor médica, desde el Sistema de Medios Públicos de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP), dialogamos con el abogado y docente, Elvis Toto, quien se especializa en la temática.

Si bien la inteligencia artificial tiene su origen a mediados de la década de 1950, su visualización a partir del Chat GPT en 2022 instaló el tema en día a día explicando, a partir de demostraciones simples, de qué se trataba la herramienta. “Entre esas interacciones, y con ayuda de la emergencia sanitaria, surgió la denominada salud digital que consiste en que se puede hablar de salud con aplicaciones de tecnología y donde la distancia es un factor crítico. Entonces a través de la tecnología se puede hacer prevención, diagnóstico y tratamiento“, explicó Toto.

Este tipo de IA, que es la denominada “generativa”, es la que más impacto y dudas está planteando. “Este tipo de IA es la que genera un contenido (chat GPT, la más conocida). Y ahí aparece lo que se considera una parte de la medicina que es el software como apoyo para la toma de decisiones. Lo que está ocurriendo ahora que hay muchos software que se utilizan para tomar decisiones médicas lo que pone en alerta también el rol del profesional de la salud“.

La inteligencia artificial generativa no es un buscador, sino que es un modelo de probabilidades que te trae una respuesta armada y que, esencialmente, lo que tiene que hacer es crear cosas

En ese debate ingresa el derecho. “Nosotros nos metemos ahí porque, por ejemplo, la atención con telemedicina significa que hay un médico y un paciente y eso rompe las reglas de la atención que era presencial, por lo cual requiere nuevas reglamentaciones. Ya sabemos que hay directrices para la atención de la telemedicina que le pone ciertas reglas a los médicos que son los que tienen que definir si la virtualidad es el el ámbito correcto para poder llevar adelante una consulta de medicina o no. Es más, hay reglas también para aquellas instituciones, que ahora tienen plataformas de asistencia con telemedicina”, detalló el especialista.

A raíz de esto es que desde la Escuela Superior de Medicina de la UNMDP hace foco en el fenómeno de las plataformas y la responsabilidad profesional. “Las obras sociales obliga a los médicos a que atiendan todo tipo de consulta y no se puede atender todo porque si te equivocas y el padecimiento requería presencialidad para poder dar un diagnóstico te pueden realizar un juicio por mala praxis que es válido por más que hayas atendido virtualmente. Por eso desde el derecho nos importa cuál es la responsabilidad del médico porque sigue siendo el responsable final“, aclaró.

La visión mundial

En Argentina, se consideran a los sistemas de IA en salud como dispositivos médicos, y por lo tanto, al igual que la FDA en Estados Unidos, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) debe regular los sistemas.” A nivel global existen distintas regulaciones así como también una postura clara por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que pide atención a la IA y solo ser utilizada como un apoyo para las decisiones médicas. El humano siempre tiene que ser el que toma la decisión final”.

Distinto es el caso de Estados Unidos. “En norteamérica hay empresas que están ofreciendo kioscos de salud. Es decir kioscos atendidos por un chat bot, lo que nos adentra en otra cuestión que es cómo se regula eso, porque la inteligencia artificial generativa no es un buscador, sino que es un modelo de probabilidades que te trae una respuesta armada y que, esencialmente, lo que tiene que hacer es crear cosas. El problema es que nosotros, los humanos, somos los que tenemos que descubrir si esa inteligencia artificial alucina o no. Nadie Te puede asegurar que una inteligencia artificial generativa no comete errores o no invente información”, aseveró Elvis Toto.

Salud Mental: el caso de CUX

La aplicación creada por Connie Ansaldi causó revuelo a fines de 2023 al ser incoporada por el Municipio de Trenque Lauquen pese a no haber pasado por el filtro de ANMAT. Aunque desde la empresa aseguran que el bot está desarrollado a partir de la experiencia de profesionales, una parte del Estado permitió que la gente interactuara con ella pese a la falta de certificación. “Todavía no se tiene las reglas necesarias para analizar el impacto que puede tenerla utilización de la IA en aplicaciones de salud mental. Es más, los usuarios no sabían si estaban hablando con un humano o con un bot”.

El “boom” de las aplicaciones de salud con la pandemia

Uno de los campos de la salud digital quedó de manfiesto en 2020. Entre los casos más resontantes a nivel local, la ESM-UNMDP fue de las primeras instituciones que realizó seguimiento de lo que se denomina telemedicina. “Las personas que estaban contagiadas de Covid-19 eran contactadas por el centro que contaba con la presencia de los estudiantes. Así, a partir de la pandemia, explotaron las aplicaciones de salud, no solamente la que registra cuántos kilómetros corrempos o sino la que registra los datos de nuestro corazón. Y aplicaciones que empezaron siendo de ese tipo y terminaron siendo de salud“, explicó.

Desde el derecho nos importa cuál es la responsabilidad del médico porque sigue siendo el responsable final

A su vez, las prepagas también empezaron a brindar este servicio. “De a poco, la asistencia virtual con un médico se volvió algo común. Eso no tenía una regulación, se venía conversando pero creció exponencialmente a partir del Covid. Y cuando hablamos de laa distancia no es solamente la que tiene que ver con la asistencia específica de un paciente con un médico, sino que también engloba las consultas entre profesionales y el seguimiento epidemiológico”.

Fuente: Portal Universidad UNMDP