La privacidad de datos sigue siendo un desafío en la atención médica

La transformación digital del sector Salud es clave para mejorar la gestión de las instituciones médicas, extender el alcance y la eficiencia de la atención a pacientes, robustecer la capacitación e investigación, y acelerar los tiempos de respuesta ante emergencias sanitarias.

En los últimos años, el sector de salud global ha tenido profundas modificaciones en lo que se refiere a la atención médica, no solamente por lo que significó la pandemia de COVID19, también porque la globalización que se refleja en el intenso intercambio de mercancías y personas hace que la amenaza de enfermedades a nivel global siga vigente. Por lo tanto, la transformación digital del sector debe acelerarse.

La mencionada problemática, de hecho, ya es tomada en cuenta por organismos internacionales como es la Organización Panamericana de la Salud, que emitió la Agenda de Salud Sostenible, el cual es un documento para el ordenamiento de este sector, en el que se incluye un apartado especial que se refiere a las tecnologías de la información y las telecomunicaciones.

Asimismo, la Organización Mundial de la Salud ha señalado que la implementación de innovaciones tecnológicas es un factor clave para: mejorar la gestión de instituciones médicas, extender el alcance y la eficiencia de la atención a los pacientes, robustecer las tareas de capacitación e investigación y desarrollo, y acelerar los tiempos de respuesta ante emergencias sanitarias

En este aspecto, la integración de servicios en la nube ha transformado significativamente la atención médica, proporcionando una infraestructura robusta y flexible, ya que los centros de datos concentran grandes volúmenes de información, entre las que se encuentran las historias clínicas, imagenología, laboratorios clínicos y seguros relacionados, entre otros.

Asimismo, el procesamiento de datos en la nube ofrece una plataforma escalable y accesible para gestionar esta información, facilitando la interoperabilidad y la colaboración entre distintos proveedores de servicios de salud, ya que los sistemas permiten a los médicos acceder a la información del paciente en tiempo real, independientemente de su ubicación. Esta capacidad no solo mejora la eficiencia en el diagnóstico y tratamiento, sino que también reduce los errores médicos al proporcionar una visión completa y actualizada del historial del paciente.

Ahora bien, para que todo esto funcione se puede contar con una plataforma que integre la mayor cantidad de aplicaciones de negocios, basada en una infraestructura de comunicaciones unificadas y colaboración (UCaaS) administrada en una nube privada redundante, lo que garantiza que los profesionales de la salud puedan estar siempre conectados y acceder a herramientas críticas de atención médica.

Para los pacientes, estos avances tecnológicos se traducen en una mejor experiencia de atención, ya que tienen acceso a sus propios registros médicos a través de plataformas en línea, lo que les permite estar más involucrados en su propio cuidado. Además, la telemedicina y el monitoreo remoto ofrecen la conveniencia de recibir atención médica sin necesidad de desplazarse, lo que es particularmente benéfico para aquellos con movilidad limitada o que viven en áreas rurales.

Sin embargo, existe un gran desafío: la privacidad de datos.

Retos y consideraciones éticas

A pesar de los numerosos beneficios, la adopción de centros de datos y la nube en el sector de la salud también presenta desafíos significativos y consideraciones éticas. Uno de los principales es la privacidad y seguridad de los datos médicos. La información de salud es extremadamente sensible y su protección es crucial. Los ciberataques y las violaciones de datos pueden tener consecuencias graves, no solo para los pacientes afectados, sino también para la confianza pública en el sistema de salud.

Por lo tanto, es esencial implementar medidas robustas de seguridad, como el cifrado de datos y el uso de firewalls avanzados, para proteger la información almacenada en la nube, para lo cual los países han implementado diferentes normas, como HIPAA, o la Ley de Portabilidad y Responsabilidad de Seguros de Salud (Health Insurance Portability and Accountability Act), que es una legislación estadounidense que se implementó en 1996 para proteger la privacidad y seguridad de la información de salud de los pacientes.

En México, se cuenta con la NOM-024-SSA3-2012, el marco regulatorio que establece los requisitos para la gestión de la información en el sector salud, en particular para el manejo de la información clínica y administrativa. Esta norma se enfoca en la protección de los datos personales de los pacientes y en la regulación de su manejo dentro del sistema de salud, cuya confidencialidad es resguardada por los socios tecnológicos de las organizaciones del sector.

Estas regulaciones, sumado a los esfuerzos de los profesionales involucrados, ayudan a mantenerse preparado en todo momento ante los desafíos globales de salud que enfrenta la humanidad. Por ello, es muy importante que la transformación digital llegue a todos los rincones de los países y regiones del mundo.

Fuente: Computer Weekly